En Sierra Leona, las organizaciones de la sociedad civil han estado haciendo campaña ante su gobierno por una mayor transparencia y rendición de cuentas y por mayores rentas del sector de recursos extractivos. Sierra Leona es rica en recursos minerales, y una serie de empresas mineras extranjeras están cosechando los beneficios, y sin embargo el país capta deplorablemente pocas rentas del sector debido a desgravaciones tributarias demasiado generosas y limitada capacidad administrativa. Aunque Sierra Leona exportó
US$145 millones en minerales en 2007, sólo US$10 millones se quedaron en el país, esto es, sólo el 5% de las rentas totales del gobierno.
En parte debido a su fracaso por imponer tributos al sector minero, el gobierno ha tratado de obtener rentas a través de otros medios. En 2009 el gobierno introdujo un nuevo impuesto a los bienes y servicios (IBS), similar al impuesto al valor añadido (IVA). Poco después de introducirse este nuevo impuesto, los activistas de Sierra Leona identificaron la naturaleza potencialmente regresiva del nuevo impuesto como un problema grave y vincularon la cuestión a su trabajo existente en materia de tributación en el sector minero.
Así, encargaron una investigación para profundizar su análisis de la estructura tributaria de Sierra Leona, incluyendo ver cómo sería sentido el IBS por las diferentes audiencias. La investigación llega en un momento en que los que trabajan en tributación en Sierra Leona están tratando de ampliar y reforzar su red y de abordar las cuestiones tributarias y de desarrollo más allá del sector de recursos extractivos. Por lo tanto, a la vez que buscar desarrollar análisis y generar propuestas para una alternativa tributaria equitativa que pueda ser compartida con los responsables de las políticas, el informe de investigación pretende también ‘apoyar el debate público más amplio e informado y la incidencia en torno a cuestiones tributarias’. Este es un ejemplo de una iniciativa de investigación para la incidencia oportuna y proactiva.